Liebig’s Extract of Meat Company Limited fue el punto de origen de la localidad que hoy en día sorprende con su extraña organización urbana. Se trataba de un importante frigorífico, creado a raíz del descubrimiento del modo de conservación del extracto de carne por parte del químico alemán Justus Barón Von Liebig, y asentado en cercanías de Colón, a orillas del río Uruguay.
Programada su construcción por parte de la empresa y levantada con un claro estilo inglés, la localidad se desarrolló alrededor de la manga por donde pasaban los animales, ubicándose de un lado las casitas seriadas de los trabajadores, y del otro las viviendas de mayor categoría pertenecientes al personal jerárquico. Sin fecha de fundación precisa, se la considera nacida en 1903, año en que el frigorífico de capitales ingleses adquirió el saladero O’Connor cambiándole el nombre por Fábrica Colón e iniciando la producción de extracto de carne y corned beef.
La empresa operó en Argentina hasta 1980 cuando las modificaciones de la legislación de la Unión Europea, los cambios tecnológicos y los nuevos gustos del mercado volvieron obsoleto al producto cárnico. El frigorífico persistió en manos nacionales hasta 1997 y luego sus ex empleados encontraron una nueva ocupación en el tour por las instalaciones.
Actualmente, la curiosa estructura física y social con la que se engendró Pueblo Liebig constituye un atractivo turístico sin igual. Pueden recorrerse las cuadras de viviendas obreras, los chalets de los directivos, las áreas comunes, el Paseo de la Manga, y hasta un singular monumento al corned beef erigido en la plaza principal.